El bacalao “a la llauna” es una receta tradicional de la cocina catalana moderna.
Una de las recetas con bacalao más famosas. Sus orígenes se remontan a la Barcelona de la revolución industrial. En las fondas de la ciudad condal servían este plato porque era económico (entonces el bacalao era muy barato) y rápido de preparar.
De aquella sencillez de las casas de comida ha llegado a nuestros hogares.
Se cocina en poco más de 10 minutos. No necesitas ser un cocinillas. Simplemente sigue los siguientes pasos y verás que el resultado queda genial.
Ingredientes para dos personas:
- 1 bote pequeño de alubias blancas “ganxet”
- 2 trozos de bacalao de unos 100 gr.
- 4 dientes de ajo
- 2 cucharaditas de café de pimentón dulce de la Vera
- 2 cucharadas soperas de harina
- 12 cucharadas soperas de aceite de oliva
- Pimienta negra al gusto
Utensilios:
- Sartén de 22 cm
- Colador
- Tabla de cortar
- Cuchillo
- Espátula
- Pinzas
- Fuente de horno (si es de metal, mejor)
Tiempo de elaboración: 15 minutos
Dificultad: baja
Elaboración:
- Precalienta el horno a 180º.
- Pela y corta los ajos a láminas finas.
- Cuela las alubias y lávalas bien bajo el agua para que saquen la espuma.
- Una vez escurridas las colocas en la fuente de horno.
- Condimenta el bacalao al gusto de pimienta negra y enharínalo. Sacúdelo para sacar la harina sobrante. De este modo no se quemará.
- En una sartén a fuego suave/alto con el aceite fríe el bacalao durante 3 minutos por cada lado aproximadamente. Si es grueso, por los 6 costados.
- Colócalo encima las judías.
- En la misma sartén con el aceite restante, dora a fuego suave los ajos. Cuando rompan el color blanco, apaga el fuego. Deja enfriarlo un poco. Añádele el pimentón de la Vera y remueve hasta que la mezcla tenga un color anaranjado.
- Aliña con este aceite el bacalao y las judías. Déjalo 5 minutos al horno y ya lo podrás servir en la misma fuente.
Hay una versión en que se le agrega medio vasito de vino blanco al ajo, una vez medio dorado. Es totalmente válida y tradicional. Entonces ten cuidado en no quemarte con las salpicaduras del agua del vino. Por eso, baja el fuego y retira la sartén del calor. Después la vuelves a cocinar hasta que todo el alcohol se haya evaporado. Lo notarás porque al oler la sartén no te pica la nariz.
Así de fácil es esta receta de la cocina tradicional catalana.